miércoles, diciembre 22, 2010

JAMÓN, JAMÓN


Se ha montado una buena con la historia educativa del docente, el jamón y el niño musulmán. No quiero ni pensar lo que puede ocurrir el día que comiencen a estudiar a los clásicos del Siglo de Oro. ¿Prohibirán las lecciones sobre Calderón de la Barca, Lope de Vega o Quevedo?
Algunas de las cosas que escribieron y algunos estudios sobre sus obras y la de otros autores pueden leerse aquí, aquí , aquí. y aquí.

1 comentario:

Ele Bergón dijo...

Durante bastantes años he impartido clases de español a inmigrantes.Entre estos tambien a los de religion musulmana. Nunca he tenido ningun problema con ellos. Solo recuerdo a un sirio que vino el primer dia a clase al ver que yo era profesora y no profesor, no volvio. Otra alumna se incorporo al grupo precisamente el dia que explicaba como se nombraban las diferentes partes del cuerpo, incluidos los genitales tanto de hombre como de mujer. Tambien desaparecio, pense que habia sido por el tema, pero con certeza no lo se.

En clase hemos hablado de todo y por supuesto tambien del cerdo y del jamon y nunca nadie se ha molestado o al menos nunca me lo han hecho saber. De todas formas, ya se sabe que en todos los grupos siempre hay alguien exagerado e intolerante, como es este caso que comentas y que ha dado tanto de que hablar.

Un abrazo
Luz