miércoles, septiembre 15, 2010

DE ESCRITORES Y PUTAS: NICOLÁS FERNÁNDEZ DE MORATÍN


- III -

PORQUE, según el género de caza,
dispone el cazador las prevenciones;
no echa a los fieros lobos los hurones,
ni dispara a las tímidas alondras
con balas de cañón de artillería,
que aquello poco y mucho esto sería,
y así son menester astucias nuevas,
si a la Marcela o chusca Sinforosa
de tu amor quieres dar líquidas pruebas,
o a la Isidra que ostenta vanidosa
por su cotilla aquel gran mar de tetas
donde la vista en su extensión se pierde
y mueve tempestad en las braguetas;
o si echar a perder un trigo verde
quieres con la Torre, santificada
con el miembro del clérigo que espera
fruto de bendición, encarcelado
por esto y por hallarse lo guardado;
o si a la Coca o Paca la Cochera
con tu virilidad atragantarlas
la garganta de abajo boca arriba;
o bien si de la Cándida muy seria
te quieres arrastrar por la barriga.
Vosotras, madre e hija, las Hueveras,
en mi canto también seréis loadas,
y no menos vosotras, las Canteras,
y la Roma, con morros abultados,
y el esponjoso empeine muy peludo
almohadón a los miembros ya cansados.
Ni dejarán mis versos en silencio
la Antonia de ojos negros, que reciente
de mi amorosa herida aún se resiente;
ni a la Marina, ni callar yo quiero
la Alquiladora que estafó a Talongo,
ni a ti, la escandalosa Policarpa,
que te hacen más lugar que a un aceitero.
No puedo menos de aplaudir, Carrasca,
el acorde vaivén de tu galope;
ningún miembro por grande se te atasca,
¡Oh Carrasca, blasón de las pobretas,
de grandes muslos y pequeñas tetas!
Ni serán de mis Musas, no, cantadas
la Teresa Mané que ha cuatro días
salió de Antón Martín de carenarse,
la Felipa y majísima Nevera,
Luisa, Giralda, y tú, Caracolera,
y la Narcisa, célebre gitana,
y la Carreterota, catalana.
También la Vinagrera que de gusto
tanto tiempo sirvió a su señoría;
pero aunque el arte de la putería
no tuviera más bien que haberme dado
la Alejandra una noche en matrimonio,
que luego a la mañana fue anulado,
eternamente yo lo celebrara.
¡Qué empeine vi, qué pechos y qué cara!
Pero dejemos esto, que escribiendo
solamente, me estoy humedeciendo, (leer más)

(NICOLÁS FERNÁNDEZ DE MORATÍN: "El arte de las putas"- Madrid, 1898)

1 comentario:

chats dijo...

Maravilloso, inteligente, erótico, perfecto.
Gracias.