ENTREVISTA A JOSÉ ANTONIO LABORDETA

El 4 de febrero de 1988 se celebró en la Asociación de Amistad España-URSS, sita en Gran Vía, 60, un recital-homenaje a Miguel Labordeta, en el que Juan Diego declamó algunos de sus poemas con una gran emotividad, y José Antonio Labordeta cantó algunas de sus canciones más conocidas y leyó poemas y textos teatrales de su hermano. Amenizó el acto al piano Juan Carlos Martínez.
Como nosotros, por aquellos años, hacíamos un programa cultural en Radio Vallekas, grabamos el acto y conseguimos entrevistar al cantautor, catedrático y político que falleció ayer.
Entre los poemas de Miguel recitados por Juan Diego se encontraban "Un hombre de treinta años pide la palabra" y "La voz del poeta".
José Antonio, por su parte, nos contó a los asistentes al acto pequeñas anécdotas de su hermano; leyó la parte final de "Oficina de Horizonte", una obra teatral que podemos ver y escuchar aquí; nos deleitó con su música, interpretando tres canciones, "El poeta", dedicada a Miguel, muerto a los 46 años de edad, "Ya ves que vamos avanzando" y "Joven azul"; y recitó el poema "Retrospectivo existente", entre otros, que podemos oír aquí en su propia voz.
La entrevista que le hicimos, a dos voces, entre Sonia y yo, es ésta, que transcribo íntegramente:

"-Cómo ve la poesía de su hermano dentro del panorama poético español?

-Yo creo que Miguel, que escribe poemas desde 1945 a 1960, -luego pasa un gran tiempo sin publicar, hasta el 68- pues yo creo que, para mí, es uno de los poetas más importantes de esa época; Celaya, Blas de Otero y él son los tres grandes poetas de este país.
¿Cuál es el problema de que Miguel no esté a la altura de ellos? Yo creo que el problema fundamental es que Miguel se quedó en Zaragoza, huyendo un poco de todo el boato de Madrid o de Barcelona y, entonces, está menos significado que los otros poetas; pero yo creo que hoy día tiene una actualidad terrible; yo no sé si habéis oído los poemas que se han recitado aquí; creo que lo mejor de un poeta es que su poesía diga las cosas que dice, que tantos años después una poesía llegue a emocionar como emociona la de Miguel, que te interese tanto como interesa, eso es difícil en un poeta.
Por ejemplo, el poema de "Un hombre de treinta años pide la palabra" me parece que cualquier hombre de treinta, de veinte años podía pedir la palabra, exactamente la misma palabra, ahora.

-Se siente identificado con eso...

-Sí, yo creo que un hombre de treinta años, de veinte años, podía pedir la palabra, y eso está escrito en mil novecientos cincuenta y tantos, ¿no?; yo creo que es el cincuenta y uno o cincuenta y dos cuando Miguel escribe eso y, bueno, demuestra que la poesía de Miguel es de una intemporalidad tremenda, que tuvo la visión de ver el mundo, y yo creo que esa es la gran fuerza de Miguel, que años después está teniendo un despegue, despegue duro y difícil, porque en este país ser poeta es una especie de desgracia, pero yo creo que cada día se lee más a Miguel y cada día se le entiende mejor.

-¿Cree que ha habido un cierto ostracismo durante estos años anteriores a la democracia para leer a Miguel?

-La democracia es igual que lo demás...

-Hay más libertad de prensa, mejor que antes...

-Sí, pero yo creo que el desnivel cultural que hay ahora también es muy gordo; hay una especie de desidia cultural, da lo mismo; el país no ha mejorado culturalmente hoy día; no creo que la gente sea más culta ahora que en la época de Franco; se puede leer más, se pueden ver más cosas, pero la realidad es que no se hace; y, sobre todo, oficialmente no se apoya...
Yo creo que los que están dominando hoy día la cultura son los fascistas; están ahí, en todas las radios; abres una radio y sale un fascista hablando; bueno, entonces la gente como Miguel...

-Nosotros, no.

-Ya, ya, pero en las radios oficiales, digo, en las radios oficiales y no oficiales, vamos, las comerciales, no las privadas...; entonces yo creo que el problema de Miguel es que lo tiene crudo porque es un poeta difícil de asumir porque casca a todo el mundo, y, entonces, una persona que casca a todo el mundo daña demasiado, y a la gente no le apetece que le peguen golpes en la cabeza...

-Sin embargo, tiene razón en todas las acusaciones que hace.

-Yo creo que sí; me parece que "un hombre de treinta años pide la palabra", me parece que es un poema....; y luego hay otra historia, también de los poemas suyos, los poemas digamos metafísicos, la pregunta que se hace el hombre; es decir, continuamente, qué hacemos aquí, los problemas del amor, etc., yo creo que son todos poemas que los escribió Miguel en una situación muy dolorosa, en un país muy cutre, como la España de los 40 y 50, y que tienen un vuelo impresionante; en eso me parece hermoso.

-De todas formas, la poesía sigue estando en la calle; no interesa a la cultura de ahora que salga a otro nivel.

-Yo creo que hay un juego a hacer una poesía de tipo elitista y cosas de estas, así, de hacer, de hacerse el dandy y hacerse el bonito, pero yo creo que la poesía debe tener garra; si no tiene garra pues se queda para unos pocos, de universidad; es como la música, que se queda para cuatro; yo creo que tiene que tener una garra..."

Felipeángel y Sonia (c)

Terminó el acto, entre aplausos y coreando todos un tema clásico de este hombre irrepetible que se nos ha ido para siempre: